Una conocida compañía aseguradora, tuvo recientemente la iniciativa de intentar averiguar qué siete platos típicos de la gastronomía española, podían considerarse los preferidos por la mayoría de habitantes del territorio nacional. Dicha iniciativa nació como apoyo y soporte ante le UNESCO, con el propósito de intentar que dicho organismo, declare a la Gastronomía Española, «Patrimonio Inmaterial de la Humanidad»
Para ello hizo una encuesta online planteando esa pregunta a los internautas. Hubo cerca de 62.000 votos válidos con verificación notarial. Tras el recuento, los siete platos más agraciados con el voto popular de este muestreo fueron la paella, el jamón ibérico, las papas arrugadas, el pulpo a la gallega, la tortilla de patatas, la quesada pasiega y los paparajotes murcianos.
Aunque sin duda, todos ellos son merecedores de estar en ese «top 7», quizá pueda sorprender que hayan quedado fuera manjares tan populares y exquisitos como la fabada asturiana, el gazpacho andaluz y manchego, el cocido madrileño, el pisto o la crema catalana.
En la rica y variadísima cocina española, ese es uno de los problemas de tener que quedarse sólo con 7.
En el restaurante Juan Abril, situado en primera línea del paseo marítimo de Altea, apostamos de manera decidida desde nuestra inauguración por ese concepto «Cocina Española», en algunas ocasiones confuso y difícil de definir. Y desde luego, ofrecemos a nuestra clientela interesantes muestras de alguna de esas maravillas culinarias referenciadas en la mencionada encuesta, y otras cuyos méritos no son menores. En especial los arroces en general y las paellas en particular.