Definir de manera ortodoxa el concepto «cocina mediterránea», es relativamente fácil, casi de perogrullo. Cocina Mediterránea es la que se hace de manera habitual en las costas del mar Mediterráneo.
Sin embargo, la complicación aparece intentando profundizar un poco más en la definición, para que la explicación no quede difusa. Diremos que, sustancialmente, cuando se habla de Cocina Mediterránea, normalmente se hace referencia a la cocina tradicional de la franja costera mediterránea española, hecha, fundamentalmente con productos autóctonos en general, y con presencia notable de pescado propio, en particular.
En este sentido, tiene un peso específico muy decisivo, las mil y una manera de preparar el arroz, tanto en lo referente a los ingredientes utilizados para ello (pescado, marisco, carne o verdura) como en las diversas presentaciones finales en base a su cocción (seco, caldoso o meloso).
La Paella, icono primordial de la Cocina Mediterránea
No sería noble ni fácil de explicar, que a estas alturas del argumentario que nos ocupa, no haya salido aún la palabra paella, que es sin duda, el icono primordial de esa cocina mediterránea y que en algunas ocasiones, por ser el plato aglutinador, actúa casi de manera exclusiva y hasta excluyente.
Pero, siendo el ingrediente principal, no sólo el arroz está presente. Una amplia variedad de guisos, frituras o hervidos, fruto todos ellos de la acumulación de experiencias de varias generaciones de madres, abuelas y marineros, han transformado sin pretenderlo de inicio, la imperiosa necesidad de comer a diario, en una manera de entender la gastronomía, que en la actualidad, está reconocida mundialmente y muy demandada por su exquisita concepción del placer de comer.
A todo ello hay que añadir la difusión científica de la llamada dieta mediterránea que transita en paralelo a una concepción saludable de la ingestión diaria de alimentos. Ayuda a la vez, el más que evidente florecimiento de una cultura gastronómica, respaldada con la profesionalización de una industria consolidada al amparo del turismo. No olvidemos tampoco todo lo que conlleva las nuevas formas del turismo gastronómico (vinos, aceites, repostería, compras…), tanto de consumo propio como el de proyección internacional.
Con todas estas consideraciones, tendremos que la Cocina Mediterránea, disfrutada además en primera línea de mar y playa, y aderezada con tradición, calidad y buen servicio, es un valioso tesoro en el que, indiscutiblemente, se pueden fundamentar los cimientos de un futuro esperanzador.
En resumidas cuentas, ¿qué es comida mediterránea? Comida Mediterránea, en un ambiente idílico en primera línea de mar es, sin ir mucho más lejos, la Carta del restaurante Juan Abril, en el Paseo Marítimo. Un buen lugar donde comer en Altea.