La oferta gastronómica de nuestro país es, probablemente, de las más completas del mundo por rica y variada. De norte a sur y de lado a lado de España encontramos en cada rincón, verdaderos manjares gastronómicos. Joyas auténticas salidas de todo tipo de cazuela y elaboradas con cariño por manos expertas y en muchos casos audaces (como son nuestras recetas de cocina española). Carnes, pescados, marisco, vinos, licores, dulces, repostería, aceites, embutidos, quesos, hortalizas, frutas… ¡¡Hasta el infinito y más allá…!!.
Sin embargo, no sería riguroso hablar de una «cocina española» como tal. Digamos que no es imaginable una denominación de origen (D.O.) Cocina Española. Poco tiene que ver un centollo o percebe gallego con un marmitako vasco, o con un gazpacho andaluz. Tampoco se parecen en nada una loncha de jamón ibérico extremeño con una paella valenciana y entre todos, no encuentran un elemento común con el cocido madrileño o con una caldereta de cordero castellana. Y, sin embargo, todos ellos son comida española.